Toda una vida dedicada a la odontología

¿Cómo funciona la Facultad de Cayetano Heredia?

Mi alma mater es (la Universidad de) San Marcos, pero yo me he dedicado a la docencia en Cayetano Heredia desde hace 42 años. Me ha gustado siempre una visión integral de la profesión. En la docencia, hemos estado en el área de prostodoncia, biomateriales y, desde 1992, estamos en el área de odontología restauradora y biomateriales. Ahí hemos trabajado en el pregrado y desde 1992 y adicionalmente en el posgrado. El 2017 es mi último año como docente activo.

 

Es un récord singular. Hay que estar enamorado de la profesión y de la docencia.

Sí, gratamente, porque la odontología para mí no es una profesión, ni un medio de vida: es la vida misma. Yo disfruto mucho la profesión, esencialmente cuando la transmito; es decir, mi visión de lo que es determinada parte de la profesión dentro de un contexto más amplio. Eso es lo que trato de comunicarles a los estudiantes, que no se centren en un solo punto, menos en una subespecialidad, sino que aborden desde una perspectiva mucho más amplia no solamente la especialidad en conexión con otras afines, u otras no tan afines aparentemente. Y que además salten un poco esa barrera que circunda nuestra profesión y la enclaustra. Hay que ver todo el contexto del mundo, por ejemplo, el campo de los compuestos no es ni por asomo un campo en el que la profesión ha liderado y, como consecuencia, se han originado cambios en todas las cosas desde la industria automotriz hasta la espacial con 'composites'.

 

Pero usted ha sido presidente de ALODYB.

Lo que quiero decir no es que de la odontología han derivado materiales para la industria, sino viceversa. En ese sentido, hay que estar mirando que pasa en el box del costado. De lo contrario, uno piensa que en la odontología se ha dado la invención de un material, cuando no es así.

 

¿Pero cómo, cuando la odontología es una labor individualista?

Esa parte de la interacción comienza mirando al costado. Hay una disciplina, maravillosa, que es la ciencia de los materiales en general. Y es válida para el ingeniero civil, de minas. Nuestra profesión está muy ligada a todo tipo de biomateriales. Tanto en la industria como en la odontología se utiliza mucho el sílice, que es uno de los materiales más abundantes en el mundo. Es un material muy económico que cuando se procesa se vuelve costoso: los márgenes de utilidad que manejan los fabricantes son muy altos. Por ejemplo, cuando uno compra una jeringa para restaurar, cuesta más el envase que el material. Ambos son polímeros, solo que uno es hecho en menor escala, ambos deben tener el mismo costo, pero el envase cuesta más que el material. Son cosas hay que ver desde una perspectiva muy diferente, con visión amplificada.

 

¿Cómo surgió la Facultad de Estomatología?

Nuestra facultad surgió en 1970, como la facultad más joven de la Universidad Cayetano Heredia. Surgimos de un modo diferente, porque la de Medicina y las demás siguen el esquema clásico. Nosotros rompimos esos modelos para crear materias de estudio paralelas, coexistiendo biomateriales con cirugía, con periodoncia. En lugar de ir una materia aparte de la otra, era ir de lo más simple a lo más complejo. Ese detalle lo trasladamos a todo. Cuando se veía la periodoncia, al principio solo era destartaje, profilaxis pero luego se llegaba hasta cirugía mucogingival. Igual en restauraciones, pequeñas hasta grandes rehabilitaciones. Eso ha ayudado al estudiante a entender que primero debe dominar la base, para luego seguir desarrollándose, y saber hasta dónde puede desarrollar sus habilidades y sus destrezas. El estudiante aprende a ser lo más ético que se pueda con su paciente.

Salió con la mira de formar odontólogos para la realidad peruana, pero primó la preocupación por un alto nivel de la población y eso hizo que no pudiésemos superar los costos para atender a grandes capas de la población. Se enfatizó en los aspectos preventivos e interceptivos, pero, no se pudo abarcar grandes capas como es el deseo del sistema.

 

Pero es considerada como la facultad peruana más reconocida.

Sí, dentro de dos años vamos a cumplir 50 años como facultad. En ese tiempo se han formado aproximadamente unos 2,500 profesionales y nuestra unidad de educación, que es postgrado, tiene 26 años. Ese es otro aspecto que es uno de los pilares en los que se sustenta nuestra misión educativa: siempre ha habido estímulos para los profesores, publicación de artículos y libros.

 

Usted de hecho ha publicado varios.

Sí. El primer que sacamos fue un libro de caries, un folleto basado en el ordenamiento de la Cariología que se dicta en Cayetano Heredia. Esto fue tomando más cuerpo hasta que la editorial Ripano de Madrid publicó "Caries Dental". Después hubo una edición en portugués.

Después de eso, bajo el alero de la Asociación Latinoamericana de Operatoria Dental y Biomateriales, he editado cuatro libros, los tres primeros han sido impresos, el cuarto debe salir próximamente. El primero se tituló "Adhesión en Odontología Restauradora", el segundo "Estética en Odontología Restauradora" y la segunda edición de "Adhesión" y ahora estamos con la segunda edición de "Estética" con lo que completaríamos ocho libros. Estamos en el emprendimiento de sacar un nuevo libro de caries, con la diferencia de que se va a poner énfasis en la máxima conservación, mínima restauración. Eso va a implicar que lo asociemos a prácticas terapéuticas y va a combinar la parte diagnóstica con la parte restaurativa.

Recursos

• U. Cayetano Heredia
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