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Una ortodoncia divertida

Radiografía 3D de un caso clínico. (Foto: Marcelo Pires Prestes)

mié. 22 mayo 2019

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El Profesor Marcelo Pires Prestes, Especialista en Ortodoncia y en Odontopediatría y Profesor del Curso de Especialización en Ortodoncia en la Universidad de FACOP en Bauru (Brasil), afirma que la Ortodoncia miofuncional, que incluye la realización de ejercicios miofuncionales que parecen un juego divertido, reduce el tiempo de tratamiento y mejora la estabilidad de los resultados.

  FACULTAD DE FACOP  

Leer trabajos científicos es actualmente una necesidad para los odontólogos que actúan tanto en el área académica como en el área clínica. De hecho, un artículo titulado ‘’Ortodoncia preventiva e interceptiva: ¿mito o realidad?" (1), cambió mi forma de practicar ortodoncia.

En ese artículo se propugnaban los beneficios de un abordaje precoz, que incluían entre otros, la eliminación de los factores etiológicos de las maloclusiones. Este simple abordaje podría, de acuerdo a los autores, prevenir la progresión de desarmonías esqueléticas, dentarias y funcionales. Así, obtendríamos un ambiente dentofacial más favorable, guiando la erupción dentaria a posiciones normales de los arcos. Esto en función de un redireccionamiento del crecimiento facial que reducirá las discrepancias esqueléticas, son recomendaciones que nunca más pude olvidar, pues el tratamiento precoz de hábitos y disfunciones tienen una relevancia crucial para obtener una oclusión adecuada.

Durante mucho tiempo, los ortodoncistas tenían como meta corregir maloclusiones solo en la dentadura permanente, despreciando enorme oportunidad de corregir discrepancias esqueléticas prematuramente en el proceso de crecimiento y desarrollo de los niños".

Si entendemos que un hábito es una acción repetitiva que se realiza automáticamente y se transforma en una rutina de comportamiento, regular e inconsciente (2), esto, así como las disfunciones respiratorias, puede ocasionar diversas alteraciones, estructurales y funcionales del sistema estomatognático (3). Entre estas alteraciones, podemos citar un crecimiento y desarrollo craneofacial insatisfatorio y la aparición de un patrón oclusal inadecuado. Estos hábitos deletéreos y disfunciones desequilibran la musculatura peribucal, así como la lengua, y contribuyen a la maloclusión, y a su vez, la respiración bucal puede persistir como hábito residual, incluso después de la liberación de las vías aéreas (4).

Durante mucho tiempo, los ortodoncistas tenían como meta corregir maloclusiones solo en la dentadura permanente, por medio de compensaciones dentarias (5), despreciando de esta forma una enorme oportunidad de corregir discrepancias esqueléticas prematuramente e ignorando el proceso de crecimiento y desarrollo de los niños. Las dificultades de diagnóstico y previsión de este proceso, probablemente, desalentaban amuchos profesionales a iniciar un tratamiento precoz. Por eso, la necesidad de la colaboración por parte también del paciente desempeñaba un papel fundamental en esta postergación. Los tratamientos con aparatos removibles utilizados en ortodoncia preventiva/interceptora y ortopedia funcional, en general son incómodos para los pacientes y, eventualmente, pueden limitar su participación en otras actividades, como deportes, clases o hasta socialmente.

Hay dos preguntas que deben hacerse antes de iniciar un tratamiento: 

¿Cuál es la real necesidad del tratamiento? (observando características como la magnitud de la maloclusión, aspectos relacionado al crecimiento/desarrollo cráneofacial, hábitos/disfunciones asociadas, compromiso estético/funcional, relación costo-beneficio del tratamiento propuesto, entre otras).

¿Cuál es la mejor oportunidad de este tratamiento? (considerando aquí aspectos relacionados a la edad dentaria/ósea y cronología, destacando la maduración del paciente en relación al tratamiento delineado, que es un elemento crítico para el éxito).

En este contexto, la ortodoncia/terapia miofuncional surge como una herramienta de gran valor para poder atender con éxito el tratamiento de la maloclusión en niños. Como el objetivo de devolver estabilidad morfofuncional a las estructuras orales aumenta la fuerza muscular, provocando cambios en los patrones funcionales y previniendo desvíos en el desarrollo craneofacial, el paciente adquiere una nueva postura de las estructuras musculares y esqueléticas, tanto en reposo como en función (6). Aparatos como Myobrace y Myosa (Myofunctional Research Co, Australia), han dado un nuevo aliento al tratamiento precoz de las maloclusiones en la corrección de hábitos deletéreos como la succión digital/chupete, deglución atípica/posicionamiento incorrecto de la lengua, bruxismo, disturbios del sueño y la ATM, respiración bucal, y muchas más.

El uso propuesto, de una a dos horas durante el día asociado con el uso nocturno, y con la realización de ejercicios miofuncionales que más parece un juego divertido, reduce el tiempo de tratamiento y mejora la estabilidad de los resultados, mejorando respiración, masticación, proporcionando armonía facial, simplificando la mecánica ortodóncica y ofreciendo más calidad de vida al paciente (7). Los aparatos pueden ser utilizados cuando el paciente está estudiando, leyendo, viendo televisión, computadora o videojuegos, y durante la noche cuando duerme, sin que interfiera en la vida cotidiana del paciente y aumentando con ello la aceptación del tratamiento.

Muchos autores —como Angle (8), Graber (9), Paul, Nanda (10), Proffit (11,12)—, destacan la acción que juega la musculatura, la lengua y la respiración bucal en la ocurrencia de problemas oclusales; conceptos de grandes maestros de la ortodoncia preventiva como los doctores Renato Almeida, José Fernando Henques y Omar Gabriel han moldeado nuestras acciones profesionales, y ahora la tecnología aplicada a la ortodoncia miofuncional preconizada por los doctores Paulo Soares y Marcia Amar, entre otros, abren nuevos horizontes en la ortodoncia contemporánea.

___________________________________________________________________________          * El Profesor y Doctor Marcelo Pires Prestes, Especialista en Ortodoncia y en Odontopediatría, es Profesor del Curso de Especialización en Ortodoncia en los campus de la Universidad de FACOP en Bauru, Sorocaba, Campus Avanzado Caxias do Sul, Campus Avanzado Goiânia, y Profesor y coordinador del Curso de Especialización en Odontopediatría en FACOP Bauru, FACOP-UDICIS Ecuadory Profesor Titular Universidad Paulista en UNIP/Bauru (Brasil).

Referencias

  1. Almeida RR, Garib DG, Henriques JFC, Almeida MR, Almeida RR. Ortodontia Preventiva e Interceptora: Mito ou Realidade? Rev Dental Press Ortodon Ortop Facial 1999 Nov- Dec;4(6):87-108.
  2. Shah AF, Batra M, Sudeep CB, Gupta M, Kadambariambildhok, Kumar R. Oral habits and their implications. Ann Med 2014 Oct;1(4):179-186.
  3. Menezes VA, Cavalcanti LL, Albuquerque TC, Garcia AFG, Leal RB. Respiração bucal no contexto multidisciplinar: percepção de ortodontistas da cidade do Recife. Dental press J Orthod2011 Nov-Dec;16(6):84-92.
  4. Ferreira MA. Hábitos Bucais no Contexto da Maturação. J Bras Ortod e Ortop Maxilar 1997 May-Jun;2(9):11-16.
  5. Moyers RE, Riolo ML. Tratamento precoce. In: Moyers RE. Ortodontia. 4. ed. Rio de Janeiro: Guanabara Koogan; 1991. p.292-368.
  6. Degan VV, Puppin-Rontani RM. Remoção de hábitos e terapia Miofuncional: restabelecimento da deglutição e repouso lingual. Pró-Fono R Atual Cient 2005 Sep- Dec;17(3):375-382.
  7. Faria PR. A utilização da Ortodontia Miofuncional no tratamento de crianças e adolescentes. Orthod Sci Pract 2014;7(27):401-406.
  8. Angle E. Classification of malocclusion. Dental Cosmos 1899;41:246-264.
  9. Graber TM. The “Three M’s”: Muscles, malformation, and malocclusion. Am J Orthodontics 1963 Jun;49(6):418-450.
  10. Paul JL, Nanda RS. Effect of mouth breathing on dental occlusion. Angle Orthod 1973;43(2):201-206.
  11. Proffit WR. Lingual pressure patterns in the transition from tongue thurst to adult swallowing. Arch Oral Biol 1972;17:555-563.
  12. Proffit WR. Equilibrium theory revisited: factors influencing position of the teeth. Angle Orthod 1978;48:175-186.

 

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