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Cuando menos es más

El autor afirma que los pacientes tienen derecho a solicitar estética, pero que los odontólogos deben integrar siempre los factores biológicos y funcionales necesarios para que sean procedimientos saludables y éticos. (Foto de Prateek Katyal en Unsplash)

dom. 1 diciembre 2019

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Enrique Jadad expone argumentos contundentes para exigir una odontología responsable que siga criterios clínicos como son los parámetros biológicos, estéticos y funcionales del paciente, especialmente en un momento en que diversos escándalos públicos han afectado negativamente a la profesión.

  DIGNIFICANDO LA ODONTOLOGIA 

Cuando menos es más” quiere decir que a los pacientes se les debe hacer sólo lo que realmente necesitan, y que éstos deben pedir menos de lo que consideran ideal”.

Recientemente di una entrevista a Blu Radio, emisora de gran audiencia en Colombia, que salió en el programa radial llamado “En Blu Jeans”, conducido por la famosa periodista María Clara Gracia. La entrevista se centró en el enorme impacto que generó la publicación de dos artículos que escribí sobre la estrecha relación entre la enfermedad periodontal y la enfermedad de Alzheimer, que fueron portada de Dental Tribune los meses de septiembre y octubre de 2019.

Igualmente, he recibido muchos mensajes y llamadas de apoyo para seguir en mi misión de devolver la Dignidad a la Odontología. El mensaje que quiero llevar a la comunidad y a los colegas es el que da título a mis conferencias recientes: “Cuando menos es más”. Esto quiere decir que a los pacientes se les debe hacer sólo lo que realmente necesitan, y que éstos deben pedir menos de lo que consideran que es ideal.

Estoy de acuerdo en que los pacientes tienen el derecho a solicitarnos estética, a querer verse bellos y presentables. Ahí es cuando debemos sentir respeto y no alejarnos del motivo de consulta ni de la integración de los factores biológicos, estéticos y funcionales. Ahora, el concepto “ideal” es relativo. En Odontología, existen procedimientos posibles, alcanzables, prácticos, pero los procedimientos “ideales” son una utopía.

Yo creo firmemente en la estética, pero en una estética Racional; no condeno las carillas, solo pido que se hagan respetando los parámetros biológicos, estéticos y funcionales. Siempre se debe tener presente la ética y la responsabilidad, pensar con la razón y no con el bolsillo, como resume una conocida regla de oro: ¡No le hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti!

En este sentido, he tratado de generar conciencia sobre el tema de Diseño de sonrisa. He pedido muchas veces también no hacer más dientes “blancox”, enormes y sobrecontorneados. Creo que debemos hacer una estética que pase desapercibida, natural y sutil. Regresemos a una odontología responsable y sostenible, digamos adiós a esa odontología desechable y mercantilista, teniendo muy presente debe ser preventiva y conservadora.

Regresemos a una odontología responsable y sostenible, digamos adiós a esa odontología desechable y mercantilista”.

Algo que me tiene muy pensativo, me ha llenado de preocupación y de vergüenza ajena son varios hechos terribles que tienen relación directa con la odontología. El primero fue ver por televisión a un conocido personaje de la política expresar que “le tengo más miedo a un odontólogo que a la Fiscalía General de la Nación”. Esto realmente nos hace ver como delincuentes o sádicos. No sé que quiso expresar este personaje, la cuestión es que lo hizo por cadenas de televisión nacional de Colombia y nos dejaron literalmente por el piso.

En otro hecho reciente, una ex senadora de la República convicta y en prisión por compra de votos, se fugó desde un consultorio odontológico al que asistió con la excusa de realizarse un Diseño de Sonrisa. Este episodio se prestó para que periodistas famosos escribieran artículos en revistas de primer nivel donde nos presentaron ante la sociedad como partícipes de actos delictivos de gran impacto, como delincuentes.

El tercer caso tiene que ver con un colega que fue arrestado en estos días en Puerto Rico por atender allí pacientes, sin tener licencia profesional ni permiso de trabajo. Las noticias decían que realizaba Diseños de Sonrisa a famosos de ese país.

Definitivamente, creo que debemos crear conciencia para ejercer la odontología como una práctica enmarcada en la ética y en procedimientos mínimamente invasivos. Se debe manejar a los pacientes de manera integral, pensando en los resultados a mediano y largo plazo y jamás de manera inmediatista. Y tenemos que darle también otro contexto a los nuevos profesionales, que deben ser formados integralmente, considerando la parte humana y con una conciencia honesta sobre lo que es salud.

La condición absolutamente obligatoria es trabajar con criterio, conocimiento y estar bien preparado para brindarle soluciones efectivas y duraderas a nuestros pacientes. Lo primero que debemos hacer a un paciente es el diagnóstico, basado en la clínica y acompañado de exámenes complementarios, programar un buen plan de tratamiento y trabajar en cada etapa del mismo respetando al máximo la oclusión y todos los tejidos involucrados.

Hace unos días recibí un lindo mensaje de la odontopediatra Matilde Osorio, que me hizo caer en cuenta de un tema clave, como es la concientización de los pacientes. La doctora Osorio me recordó la importancia que tiene el riesgo de adquirir caries y que los odontólogos poco cuidado le ponemos a los índices del sistema internacional para la detección y diagnóstico de caries (ICDAS o ICCMS).

El uso de la fresa es de hecho un fracaso en prevención, un último recurso y un mal ejemplo para la percepción de la odontología de un paciente infantil.

En manos de un odontopediatra que de verdad trabaje prevención, el paciente crecerá valorando su tejido original y queriéndose como es. Ese paciente apreciará conscientemente la importancia de tener intactos sus tejidos dentales y periodontales, sabiendo que lo que tiene es su sello personal. Además, debemos educar a los pacientes infantiles para que entiendan que el tejido dental que se elimina no se regenera más.

Escribir para importantes medios de comunicación y aparecer en emisoras de radio serias y estaciones de televisión nacional me ha facilitado el camino para llevar estas tristes denuncias al oído de altos dignatarios de la odontología en diferentes estrados, universidades, gremios, corporaciones, instituciones. Espero realmente que recapaciten y tomen el sendero correcto por el bien de la odontología y de los pacientes, porque realmente estamos viviendo un mal momento en nuestra profesión, y nos encontramos ante episodios de vergüenza social difíciles de poder superar.

Todas estas reflexiones están destinadas a concientizar no sólo a los pacientes sino a nuestros propios colegas, para que sus tratamientos sigan pautas que respeten los parámetros biológicos, estéticos y funcionales del paciente. Estos son conceptos que se enmarcan totalmente en la ética y la responsabilidad profesional de todo odontólogo.

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El doctor Enrique Jadad Bechara es Especialista en Rehabilitación Oral, investigador y conferencista con práctica privada en Barranquilla (Colombia). Fundador del Grupo Dignificar la Odontología. Contacto: ejadad@gmail.com

 

 

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