DT News - Latin America - Perdona a tus pacientes

Search Dental Tribune

Perdona a tus pacientes

jue. 11 abril 2019

guardar

Este fin de semana hemos dado un curso en Palma de Mallorca, una maravilla de ciudad y de gentes. Pero una vez más, vuelvo a ver ese enfado que produce al profesional de la odontología las palabras, la conducta, la actitud de algunos de sus pacientes.

  PSICOLOGIA & ODONTOLOGIA  

Esos pacientes que llegan con un dolor con el que llevan un mes, casi a la hora de cerrar al final de un duro día, con exigencias, con malas formas, pidiendo una atención gratis en odontología privada. Para muchos profesionales de la odontología esta es una situación que cuesta manejar; por una parte, cómo no se va a atender a un paciente que tiene dolor, un paciente que sufre, esa es su vocación “sanar el dolor de las personas”, y, además, hoy tampoco estamos para perder pacientes. Y, por otra parte, está su propia dignidad, su propio bienestar, el dolor por el egoísmo del otro. ¿Cómo sopesamos qué es más importante? El profesional se deja llevar por su humanidad, y ese día llega más tarde a casa a ver a sus hijos por atender a este paciente que lleva un mes con dolor y que no valora su esfuerzo, ni siquiera para pagar sin quejas su atención. ¿No es duro?

Le atiendes, consigues cobrarle y al ir a darle cita para otro día ves que duda, ves poca implicación en su propio tratamiento. ¿Cómo vas a estar tú más interesado que tu paciente en su tratamiento? Pues sí, así es en muchos casos, el paciente no conoce la importancia de su propia curación. Pero esta actitud nuevamente produce en ti enfado, frustración, duda. El paciente sólo puede ir a una hora que ya tienes ocupada o que te supone prolongar tu horario laboral. Aun así, nuevamente, haces un esfuerzo y piensas en cambiar a un paciente a otro día o quedarte un poco más por él. Te vas a casa alterada y te cuesta desconectar ese día de la jornada laboral.

“Atender a tus pacientes no significa ser sumiso ante ellos. Es importante que tengas tu protocolo de actuación claro y los límites de cómo quieres actuar". 

La cosa no queda ahí: ese paciente no aparece el día de su cita: has cambiado a otro paciente fiel, has prolongado tu jornada laboral, has cedido por el otro, y al otro le ha importado poco todo tu esfuerzo.

¿Cómo te afecta esta situación?

Conviene aprender a manejar esta situación y similares para que no te afecten, atender a tus pacientes no significa ser sumiso ante ellos. Es importante que tengas tu protocolo de actuación claro y los límites de cómo quieres actuar claros. Eso no significa que NUNCA hagas la excepción de atender fuera de horario o cambiar a unos pacientes por otros, pero tampoco que lo hagas SIEMPRE. Hay días que te importa más porque estás más cansada o porque tienes planes o por lo que sea, y días que te importa menos. Eso debes tenerlo en cuenta a la hora de tomar este tipo de decisiones. Y no eres tú la única; a los miembros de tu equipo también hay que consultarles si les importa o no quedarse cinco o diez minutos más. El hecho de que consultes a tu equipo creará en ellos un mayor ánimo de hacer cosas por su líder.

Otro criterio, por ejemplo, es hacer excepciones sólo por pacientes de toda la vida.

También, por ejemplo, puedes atenderle, pero luego no volver a ceder y forzar un hueco para la cita. Si eso no te hace sentir bien, no lo hagas. No se puede ir constantemente en contra de lo que te gustaría hacer, eso te enfermará. No hace falta, de verdad: el paciente que quiere que le atiendas será capaz de adaptarse un poquito a la clínica. Buscando con dulzura, amabilidad y asertividad una solución conjunta se encuentra.

Cada paciente que nos produce un enfado nos deja huella. Una pequeña herida, aunque no nos demos cuenta. Para que no se quede esa herida, la única solución es no empujarnos a nosotros mismos a hacer lo que no queremos hacer y PERDONAR al paciente, saber que el paciente tiene miedo, inseguridad, dolor y que en esa situación es fácil ser egoísta, exigente. aunque no por ello les tenemos que dar todo lo que quieren. Y, finalmente, si tú estás seguro en tus decisiones y dulce en la búsqueda de la solución conjunta, al paciente se le pasarán sus miedos y confiará en ti, se pondrá en tus manos y todo será más cómodo para todos. Quien dirige la situación debe ser el profesional de la odontología, siempre dando a entender al paciente que su situación y opinión es tenida en cuenta. PERDONA a tus paciente y tu herida sanará.

___________________________________________________________________________* La Dra. Helga Mediavilla, fundadora de Psicodent en Madrid (España), es Psicóloga Clínica y Coach.

advertisement
advertisement